Usar un vehículo como garantía para abrir una línea de crédito personal puede darte liquidez flexible sin vender tu moto o tu coche. Ahora bien, ¿conviene más una línea de crédito con moto como aval o con coche como aval? En esta guía comparamos ambos productos con números realistas, requisitos y riesgos para ayudarte a decidir con criterio.
- Qué tienen en común estas líneas de crédito
- Diferencias clave: moto vs coche como aval
- Cuánto te pueden prestar según el vehículo (números orientativos)
- Ejemplos básicos
- Escenarios típicos
- Costes reales: cómo impactan en la TAE de tu línea
- Un número orientativo
- Requisitos y documentación: en qué se diferencian
- Cuándo elegir moto vs coche como aval
- Te conviene usar una moto como aval si…
- Te conviene usar un coche como aval si…
- Riesgos y cómo mitigarlos
- Alternativas si no encajas
- Pasos para tramitarla bien (checklist)
Contenido informativo. Condiciones y límites orientativos; confirma siempre los términos finales con la entidad.

Qué tienen en común estas líneas de crédito
En ambos casos hablamos de una línea de crédito a tu nombre, con un límite de disposición y liquidaciones periódicas de intereses sobre el saldo usado. La garantía es una prenda sin desplazamiento sobre el vehículo, que se inscribe y te permite seguir conduciéndolo mientras cumples el contrato. Si hay impago grave, la entidad puede ejecutar la garantía.
Comparte la lógica de productos explicados en detalle aquí: la línea de crédito con moto como aval y la línea de crédito con coche como aval.
Conceptos clave que verás en las ofertas:

- TIN (Tipo de Interés Nominal): porcentaje que se aplica al saldo dispuesto.
- TAE (Tasa Anual Equivalente): coste total anual que incluye intereses y comisiones. En líneas con comisiones de apertura/disponibilidad, la TAE suele ser sensiblemente mayor que el TIN.
- LTV (Loan To Value): porcentaje del valor de tasación sobre el que calculan tu límite.
Diferencias clave: moto vs coche como aval
Las dos modalidades no se comportan igual a ojos del banco o del financiador. Estas son las diferencias prácticas que suelen marcar el límite, el coste y la facilidad de aprobación:
- Liquidez y mercado de segunda mano: los coches son más líquidos que las motos en la mayoría de gamas. Esto suele permitir LTVs algo más altos con coche a igualdad de perfil.
- Volatilidad de valor: muchas motos pierden valor más deprisa que coches equivalentes; además, hay mayor dispersión por cilindrada y estado. Las entidades penalizan esa volatilidad con LTVs más conservadores.
- Edad y kilometraje: motos con más de 10–12 años o muy kilométricas pueden quedar fuera. En coches, el corte puede ser un poco más laxo según marca/modelo.
- Cuantía del límite: al partir de tasaciones medias más bajas en motos, el límite resultante suele ser inferior (p. ej., 1.500–4.000 € vs 3.000–8.000 € en coches de gama media, orientativo).
- Costes fijos (tasación, gestoría, notaría): al ser importes fijos, pesan proporcionalmente más en motos, encareciendo la TAE efectiva si el límite es bajo.
- Seguro exigido y endosos: a veces se exige cobertura a todo riesgo o, como mínimo, un seguro con ciertas coberturas y comunicación de la prenda. En coches es más habitual el endoso de póliza; en motos depende de la entidad.
| Aspecto | Línea con moto como aval | Línea con coche como aval |
|---|---|---|
| LTV típico (orientativo) | 30%–50% | 40%–60% |
| Antigüedad admitida | Hasta 10–12 años (según modelo) | Hasta 12–15 años (según modelo) |
| Límite resultante habitual | 1.000–4.000 € | 2.000–10.000 € |
| Costes fijos/TAE efectiva | Impacto mayor si el límite es bajo | Impacto menor relativo |
| Exigencia de seguro | Variable; menos endosos | Más frecuente endoso/exigencias |
| Agilidad de reventa (si se ejecuta) | Media/Baja (según cilindrada) | Media/Alta |
Nota: rangos meramente ilustrativos. Cada entidad aplica criterios propios y ajusta por marca, modelo, estado y perfil de riesgo.
Cuánto te pueden prestar según el vehículo (números orientativos)
La tasación es el punto de partida. Por eso te interesa entender cómo se valora un vehículo: métodos de referencia, inspección, ajustes por estado. En coches, te ayudará esta guía sobre cómo tasan tu coche.
Ejemplos básicos
- Coche compacto 2016, 10.000 € de tasación. LTV del 50%: límite estimado 5.000 €. Si el TIN es del 18% y hay comisión de apertura del 2%, la TAE puede situarse por encima del 24% según uso y comisiones de disponibilidad.
- Moto 500 cc 2017, 4.000 € de tasación. LTV del 40%: límite estimado 1.600 €. Con mismos tipos y comisiones fijas (tasación, notaría), la TAE se incrementa más que en el coche por el menor límite.
- Coche familiar 2019, 15.000 € de tasación. LTV del 55%: límite estimado 8.250 € si el perfil lo soporta. Costes fijos pesan menos en porcentaje.
- Moto urbana 125 cc 2020, 2.500 € de tasación. LTV del 35%: límite estimado 875 €. En estos importes, valora si compensa por costes fijos y comisiones.
Escenarios típicos
- Moto premium o muy cuidada: algunas entidades mejoran LTV. Aun así, el límite absoluto puede quedar corto si necesitas más de 3.000–4.000 €.
- Coche generalista bien mantenido: balance óptimo entre LTV, costes y rapidez de aprobación para límites de 3.000–8.000 €.
- Moto clásica: si es de colección y está documentada, puede requerir tasación especializada. En líneas, muchas entidades son conservadoras con clásicos por su liquidez.
Costes reales: cómo impactan en la TAE de tu línea
En líneas de crédito con aval de vehículo, el coste no es solo el TIN. Las comisiones de apertura, disponibilidad, tasación, gestoría y notaría pueden elevar la TAE. Aprende a calcular el coste real (TAE) de una línea de crédito para comparar ofertas de forma justa.
Un número orientativo
Imagina un límite de 5.000 €, TIN del 18% anual, comisión de apertura del 2% (100 €), comisión de disponibilidad del 3% anual sobre el límite no usado, tasación de 90 € y notaría/gestoría de 180 €. Si usas de media 3.000 € durante un año, tus intereses serían ~540 €; suma comisiones fijas y de disponibilidad y verás que la TAE puede situarse 6–10 puntos por encima del TIN, según uso. En un límite de 1.600 € (moto), los mismos costes fijos pesan más y la TAE efectiva sube varios puntos adicionales.

Revisa también las comisiones habituales en líneas de crédito personales (apertura, disponibilidad, excedidos) y negocia donde sea posible.
Requisitos y documentación: en qué se diferencian
En lo esencial, te pedirán identificación, solvencia (nóminas o ingresos), informes de riesgo y documentación del vehículo. Las diferencias vienen por el detalle técnico del bien:
- Motos: certificado vigente de ITV si aplica, informe de la DGT, libre de cargas, llaves, historial de mantenimiento. Algunas entidades son más restrictivas con cilindradas pequeñas o motos muy antiguas.
- Coches: además del paquete estándar, suele pedirse un seguro con coberturas mínimas y, en ocasiones, endoso o comunicación de la prenda a la aseguradora.
Si es tu primera línea, repasa la documentación para pedir una línea de crédito personal y prepara tus extractos 90–180 días antes con movimientos ordenados.
Cuándo elegir moto vs coche como aval
Te conviene usar una moto como aval si…
- Necesitas una cantidad reducida (p. ej., 1.000–3.000 €) y tu moto está en buen estado y libre de cargas.
- Quieres mantener tu coche libre para otro uso financiero.
- El coste fijo total no hace que la TAE se dispare (comprueba números).
Te conviene usar un coche como aval si…
- Buscas un límite mayor y un LTV algo más alto.
- Tu coche es relativamente reciente, de marca líquida y con buen historial.
- Asumes los posibles requisitos extra de seguro/endoso.
Si con tu moto no alcanzas el límite deseado, valora combinar garantías en una línea de crédito personal (p. ej., moto + avalista o ingresos sólidos) para mejorar el límite sin elevar demasiado el coste.
Riesgos y cómo mitigarlos
- Ejecución de la prenda: el impago puede llevar a la venta del vehículo. Usa la línea solo para necesidades puntuales y planifica amortizaciones.
- Sobreendeudamiento: en líneas es fácil “tirar” del límite. Fija un tope de uso interno (p. ej., 50% del límite) y revisa tu DTI (ratio de endeudamiento).
- Costes ocultos: vigila comisiones de disponibilidad, estudio, gestoría o por excedido.
- Seguro: verifica coberturas exigidas y la obligación de comunicar la prenda a la aseguradora si procede.
Recuerda: una línea aporta flexibilidad, pero es un crédito rotativo. Define para qué la usarás y durante cuánto tiempo para no pagar intereses innecesarios.
Alternativas si no encajas
- Solo con nómina: algunas entidades ofrecen líneas de crédito solo con nómina con límites menores pero sin aval.
- Con avalista: si tu moto o coche no dan suficiente límite, una línea de crédito personal con avalista puede mejorar aceptación y coste.
Pasos para tramitarla bien (checklist)
- Define el objetivo: importe y uso previsto (y tope de utilización mensual).
- Reúne documentación: DNI/NIE, ingresos, extractos 3–6 meses, papeles del vehículo, seguro, ITV.
- Prevalora el vehículo: fotos, mantenimiento, accesorios. Evita modificaciones no homologadas.
- Compara ofertas: TIN, TAE, comisiones, LTV y costes fijos. Calcula la TAE con tus usos probables.
- Negocia puntos clave: comisión de apertura, disponibilidad, requisitos de seguro, posibles periodos sin comisión por no uso.
- Firma e inscripción: revisa el contrato, la prenda y que no haya cláusulas abusivas. Conserva justificantes.
- Uso responsable: calendariza amortizaciones y revisa tu límite cada 6–12 meses.
Si quieres profundizar por modalidad, revisa las guías específicas: línea de crédito con moto como aval y línea de crédito con coche como aval.
Disclaimer: este artículo no es asesoramiento financiero personalizado. Las condiciones mencionadas son orientativas y pueden cambiar. Consulta siempre las condiciones actualizadas con la entidad.
