Necesitas liquidez pero no quieres vender tu cartera de valores. El préstamo lombardo puede ser la solución: una financiación con tu depósito de inversión como garantía. Es habitual en banca privada y cada vez más disponible en banca tradicional para clientes con carteras diversificadas.
- ¿Qué es un préstamo lombardo?
- ¿Qué activos se aceptan como garantía y cuánto prestan?
- ¿Cómo calculan el LTV?
- Cómo se contrata (paso a paso)
- Costes reales: interés, comisiones y TAE
- Ejemplo numérico (orientativo)
- Riesgos y advertencias
- Requisitos habituales de los bancos
- ¿Para quién tiene sentido?
- Alternativas si no tienes cartera (o no te convence el lombardo)
- Casos prácticos (con números)
- Caso A: liquidez sin vender letras del Tesoro
- Caso B: llamada de margen por caída de acciones
- Consejos para usar bien un lombardo
- Comparativa rápida: lombardo vs préstamo personal vs línea de crédito
- Conclusión
En esta guía explicamos, con lenguaje claro, cómo funciona, qué activos admite como colateral, cuánto suelen prestar (LTV), costes, riesgos de llamada de margen y en qué casos tiene sentido. Contenido informativo. Consulte siempre condiciones actualizadas con su entidad.
¿Qué es un préstamo lombardo?
Un préstamo lombardo es un crédito o préstamo respaldado por una prenda sobre activos financieros (acciones, fondos, bonos, ETFs, letras del Tesoro…). El titular mantiene la propiedad de los activos, pero los pignora a favor del banco. A cambio, la entidad presta un porcentaje del valor de mercado de esa cartera, llamado LTV (Loan To Value).
En la práctica, el lombardo funciona como una línea de crédito o un préstamo a corto/medio plazo con interés normalmente variable (Euríbor + diferencial). Si el valor del colateral cae, pueden pedirte más garantías o amortización parcial: es la conocida llamada de margen.
Si quieres una visión general de las prendas financieras más allá del lombardo, te interesará este artículo sobre préstamo pignorado.
¿Qué activos se aceptan como garantía y cuánto prestan?
Depende de cada banco, pero, por regla general, cuanto más líquido y menos volátil sea el activo, mayor LTV permiten. Ejemplos típicos:
Activo financiero (ejemplos) | LTV orientativo | Notas |
---|---|---|
Letras del Tesoro, bonos soberanos zona euro de alta calidad | 60% – 85% | Alta liquidez; LTV alto |
Fondos monetarios y de renta fija IG (UCITS) | 50% – 80% | Depende de la duración y rating |
ETFs líquidos (MSCI World, EuroStoxx 50, S&P 500) | 40% – 70% | UCITS, réplica física preferible |
Acciones IBEX 35/EuroStoxx 50 de gran capitalización | 30% – 60% | Descuento por volatilidad |
Acciones mid/small caps, mercados emergentes | 0% – 40% | Puede no admitirse |
Bonos corporativos high yield | 0% – 50% | Depende de rating y liquidez |
No suelen aceptarse: planes de pensiones (indisponibles salvo supuestos legales), fondos ilíquidos, hedge funds, productos estructurados complejos, derivados con apalancamiento o criptoactivos.
¿Cómo calculan el LTV?
La entidad aplica un descuento (haircut) al valor de mercado de cada activo según su riesgo y liquidez. Sobre el valor descontado sumado de la cartera define el límite de crédito. Además, suelen fijar umbrales de seguridad para activar alertas o llamadas de margen si el LTV se aproxima al máximo.
Cómo se contrata (paso a paso)
- Análisis de la cartera: la entidad revisa composición, liquidez y volatilidad. Puede pedirte trasladar los valores a su depositaría.
- Contrato de prenda/pignoración: firmas la afectación de los activos como garantía del crédito.
- Definición de límites: importe máximo (LTV), tipo de interés (TIN), comisiones y covenants (por ejemplo, LTV máximo del 60%).
- Disposición: puede ser un préstamo a plazo o una línea de crédito con disponibilidad y devolución flexible.
- Seguimiento: si el mercado cae y el LTV se dispara, la entidad puede requerir más colateral o amortización. Si no cumples, puede vender activos pignorados para cubrirse.
Costes reales: interés, comisiones y TAE
Los costes varían según banco, perfil y tamaño de la cartera. Elementos habituales:
- TIN: Euríbor (a 1/3/6 meses) + diferencial (p. ej., 1,0% – 3,0%).
- Comisión de apertura: 0,25% – 1,00% sobre el límite o dispuesto.
- Comisión de disponibilidad (si es línea de crédito): 0% – 0,50% sobre el saldo no utilizado.
- Depósito/custodia de valores: según tarifario de la depositaria (p. ej., 0,10% – 0,30% anual).
- Otros: gastos de transferencia, valoración u operativa de traslado de la cartera.
Recuerda: el coste total se mide por la TAE, que incluye intereses y comisiones. Si necesitas refrescar conceptos, aquí tienes las diferencias entre TIN y TAE y cómo calcular el coste total de un préstamo.
Ejemplo numérico (orientativo)
Imagina una cartera en letras del Tesoro de 100.000 €. El banco admite LTV 80%. Solicitas 60.000 € a 12 meses como préstamo a tipo variable (Euríbor 3m 3,5% + 1,5% = TIN 5,0%). Comisión de apertura 0,50% (300 €) y custodia de valores 0,20% anual (200 € sobre 100.000 €).
- Intereses 12 meses: 60.000 € × 5,0% = 3.000 €
- Comisión de apertura: 300 €
- Custodia anual: 200 € (puede existir igualmente sin préstamo)
Coste financiero principal del préstamo: 3.000 € + 300 € = 3.300 € (sin considerar la custodia que quizá pagarías igual). La TAE efectiva rondaría el 5,5% – 6,0% según calendario de liquidación y comisiones menores.
Riesgos y advertencias
- Riesgo de mercado: si la cartera baja y superas el LTV permitido, tendrás llamada de margen. Si no aportas efectivo o más colateral, el banco puede vender tus activos en un momento desfavorable.
- Tipo de interés variable: si sube el Euríbor, sube tu cuota.
- Riesgo de concentración: usar como garantía acciones muy volátiles eleva la probabilidad de ventas forzosas.
- Riesgo fiscal: si venden activos con plusvalía para cubrirte, tributarás por la ganancia.
- Sobreendeudamiento: apalancar una cartera multiplica pérdidas en caídas. Define límites y horizonte.
Consejo: revisa siempre la letra pequeña del contrato (condiciones de venta forzosa, plazos de margen, comisiones por amortización anticipada, etc.).
Requisitos habituales de los bancos
- Ser titular de los valores y, por lo general, depositarlos en la entidad prestamista.
- Carpeta de inversión suficiente: importes mínimos (a menudo desde 50.000 €–100.000 €) y adecuada diversificación.
- Perfil MIFID y tolerancia al riesgo acordes al producto.
- Historial crediticio y situación de endeudamiento. Este préstamo suele aparecer en la CIRBE; consulta cómo se informa en qué es la CIRBE y cómo afecta a tus préstamos.
- Documentación: DNI/NIE, IRPF, extractos de la cartera, justificantes de ingresos y patrimonio.
¿Para quién tiene sentido?
Casos en los que el lombardo puede encajar:
- Liquidez puntual sin vender inversiones (p. ej., pago de impuestos, entrada de vivienda, gastos temporales).
- Diferir fiscalidad: evitar materializar plusvalías si crees que el mercado se recuperará.
- Arbitrar ineficiencias o aprovechar oportunidades de inversión con apalancamiento moderado.
- Emprendedores o autónomos con cartera que necesitan financiación flexible a corto plazo.
Cuándo no suele convenir: para financiar gasto recurrente, si tu cartera es muy volátil o si ya estás muy endeudado (revisa tu ratio de esfuerzo y evita el sobreapalancamiento; puede ayudarte esta guía sobre cómo evitar el sobreendeudamiento).
Alternativas si no tienes cartera (o no te convence el lombardo)
- Préstamo pignorado con depósitos o fondos de menor volatilidad: cómo usar tu depósito o fondos como garantía.
- Línea de crédito personal (sin garantía real): mayor coste y menor límite, pero sin riesgo de ventas de cartera.
- Crédito con garantía hipotecaria si tienes un inmueble y necesitas importes mayores (ver cómo funciona una línea de crédito con garantía hipotecaria).
- Anticipo de nómina o financiación puntual más simple si el importe es pequeño.
Compara alternativas por TAE, comisiones y riesgos reales. Evita soluciones rápidas con costes desproporcionados.
Casos prácticos (con números)
Caso A: liquidez sin vender letras del Tesoro
• Cartera: 150.000 € en letras del Tesoro a 6–12 meses. LTV permitido: 80%.
• Necesidad: 50.000 € durante 9 meses.
• Condiciones: TIN 4,2% (Euríbor 6m + 1,2%), apertura 0,5% (250 €), sin comisión de disponibilidad.
Coste de intereses: 50.000 € × 4,2% × 9/12 ≈ 1.575 €. + apertura 250 € = 1.825 € (TAE aprox. 4,8%–5,2%). Sin llamadas de margen previsibles al tratarse de letras (baja volatilidad).
Caso B: llamada de margen por caída de acciones
• Cartera: 120.000 € en acciones diversificadas del IBEX (LTV 50%).
• Límite concedido: 60.000 €; dispuesto: 45.000 €.
• El mercado cae un 20%: la cartera pasa a 96.000 €. Límite por LTV: 48.000 €.
Resultado: con 45.000 € dispuestos sigues dentro del nuevo LTV (48.000 €), pero la entidad puede exigir margen extra si tu contrato fija umbrales (p. ej., alerta a LTV > 85% del tope). Si hubieras dispuesto 55.000 €, estarías por encima y te exigirían amortizar 7.000 € o aportar más colateral en 24–48 h. De no hacerlo, podrían vender acciones con la pérdida del 20%.
Consejos para usar bien un lombardo
- No apures el LTV: trabaja con margen (p. ej., usa el 40%–60% del límite).
- Prefiere colateral poco volátil (letras del Tesoro, bonos de alta calidad, fondos monetarios) para reducir llamadas de margen.
- Plazos cortos y plan de salida claro: define cuándo y cómo amortizarás.
- Alerta de caídas: configura avisos por precio y LTV; prepara efectivo de emergencia.
- Calcula la TAE y todos los gastos asociados antes de firmar; compara con otras opciones.
- Lee los covenants: umbrales de LTV, plazos de reposición y facultades de venta del banco.
Comparativa rápida: lombardo vs préstamo personal vs línea de crédito
Característica | Préstamo lombardo | Préstamo personal | Línea de crédito (sin garantía real) |
---|---|---|---|
Garantía | Cartera pignorada | Sin garantía real | Sin garantía real |
Coste típico | Medio-Bajo (según LTV y perfil) | Medio-Alto | Medio-Alto |
Importe máximo | Según valor cartera (LTV) | Según ingresos y scoring | Según ingresos y scoring |
Riesgo de venta forzosa | Existe (llamada de margen) | No | No |
Agilidad | Alta si la cartera está en el banco | Media | Alta |
Perfil idóneo | Inversores con cartera líquida | Consumo general | Liquidez flexible puntual |
Conclusión
El préstamo lombardo es una herramienta potente para obtener liquidez sin vender tus inversiones. Sus ventajas (coste competitivo, rapidez y flexibilidad) van de la mano de un riesgo claro: la llamada de margen si la cartera cae. Úsalo con LTV prudente, colateral estable y plan de amortización. Y, antes de firmar, revisa TIN/TAE, comisiones y cláusulas de venta, y cómo se reflejará en tu CIRBE.
Aviso: contenido informativo. Las condiciones varían según entidad, perfil y activos. Confirma siempre términos actualizados con tu banco.