Préstamos para trabajadores con ingresos variables (comisiones y bonus): cómo acreditarlos, qué computa el banco y cómo mejorar tus opciones

Si cobras una parte importante de tu salario en comisiones, incentivos, horas extra o bonus, pedir un préstamo puede ser más complejo. No porque ganes menos, sino porque el banco tiende a computar los ingresos variables con prudencia, aplicando medias y descuentos. La buena noticia: si preparas bien la documentación y presentas tu perfil con método, puedes mejorar el importe que te aprueban y el tipo de interés.

En esta guía práctica te explico cómo valoran las entidades los ingresos variables, qué documentación pedirán, cómo calcular tu ingreso computable y tu cuota máxima, y qué pasos seguir para aumentar tus opciones sin asumir riesgos innecesarios.

Trabajador revisando nóminas con partidas variables resaltadas

Qué considera el banco como ingresos variables (y por qué los descuenta)

Para una entidad, son ingresos variables aquellos que no están garantizados por contrato o que fluctúan mes a mes: comisiones por ventas, incentivos por objetivos, bonus anuales, horas extra, pluses irregulares, dietas o propinas. Aunque en tu día a día estos importes sean recurrentes, el banco los analiza como menos estables y suele:

  • Calcular una media de 6–12 meses (a veces 24 si hay bonus anuales).
  • Aplicar un coeficiente de prudencia (por ejemplo, computar solo el 50–80% del variable medio).
  • Excluir partidas no salariales (dietas o propinas que no figuran en nómina).

El objetivo de la entidad es que la cuota no dependa de un mes excepcional, sino de un nivel de ingresos sostenible. Esto afecta directamente a tu DTI (debt-to-income), el ratio de endeudamiento que determina tu cuota máxima. Si no lo conoces, conviene repasar cómo se calcula y qué límites manejan los bancos en España en esta guía del DTI.

Requisitos habituales si cobras comisiones, incentivos u horas extra

No existe una regla única para todas las entidades, pero en la práctica encontrarás estos criterios:

  • Antigüedad mínima en la empresa: 6–12 meses para valorar bien la recurrencia del variable. Relacionado: qué valoran en tu historial y cómo preparar tu cuenta en 90–180 días en este artículo.
  • Estabilidad del contrato: indefinido o, si es temporal, que se observe continuidad (renovaciones sucesivas).
  • Antigüedad sectorial: si cambiaste de empresa pero sigues en el mismo sector/rol, suma puntos.
  • Variable recurrente: que aparezca en nómina, con conceptos identificables (comisión, incentivo, horas extra).
  • Límites de DTI: suelen situarse entre el 30–40% de tus ingresos computables. Superar ese rango reduce opciones.

Documentación clave para acreditarlos bien

Lo esencial es demostrar que tu variable es real, recurrente y bancarizado. Prepara:

Gráfico simple mostrando cómo el banco computa ingresos fijos y variables

  • Nóminas de 12 meses (si tienes bonus anual, aporta 24 meses para que se vea periodicidad).
  • Contrato de trabajo y últimas prórrogas si aplican.
  • Certificado de empresa indicando conceptos e importes variables aproximados (si puedes conseguirlo).
  • Resumen de retenciones (modelo 190) o certificado anual de ingresos, cuando esté disponible.
  • Vida laboral actualizada.
  • Extractos bancarios 6–12 meses con abonos de nómina identificables. Aquí te explicamos qué miran los bancos en tus extractos y cómo prepararlos.

Complementa con la checklist completa de documentación para un préstamo personal y presenta cada archivo con nombre claro (mes_año_nomina.pdf, contrato.pdf, etc.).

Cómo calcula el banco tu ingreso computable (con ejemplos)

Las entidades mezclan medias y coeficientes de prudencia. Dos formas habituales:

  • Media simple 12 meses del bruto neto mensual (fijo + variable), restando prorratas no recurrentes.
  • Fijo 100% + variable parcial (por ej., 60–80% del promedio de variable de 12 meses).

Ejemplo orientativo de cómputo conservador (no vinculante):

ConceptoImporte mensualCómputoIngreso computable
Salario fijo neto1.100 €100%1.100 €
Variable medio 12 meses600 €70%420 €
Total ingreso computable1.520 €

Con un DTI objetivo del 35%, la cuota máxima aproximada sería 1.520 € x 35% = 532 €. Si ya tienes otras cuotas (por ejemplo, 120 €), tu margen para nueva cuota se reduce a 412 €.

Calculadora y extractos bancarios preparados para una solicitud de préstamo

Cuánto podrías pedir: números orientativos

Supón una TAE del 9,5% (ejemplo orientativo; recuerda que la TAE incluye intereses y comisiones, a diferencia del TIN). Con una cuota objetivo de 410 €:

  • A 48 meses: podrías situarte en torno a 15.500–16.500 €.
  • A 72 meses: el capital podría subir a 22.000–23.500 €, pero pagarías más intereses totales.

Estos números son simulaciones aproximadas para ilustrar cómo impacta el ingreso computable y el plazo. La oferta final dependerá de tu perfil y de las condiciones de la entidad.

Ejemplo comparado con dos perfiles

  • Comercial retail: fijo 1.000 €, variable medio 800 € (70% computado = 560 €). Ingreso computable: 1.560 €. DTI 35% → cuota objetivo 546 €.
  • Hostelería: fijo 1.100 €, horas extra variables medias 250 € (60% computado = 150 €). Ingreso computable: 1.250 €. DTI 35% → cuota objetivo 437 €.

La diferencia de variable computable se traduce en distinta capacidad de endeudamiento.

Tabla de DTI y cuota máxima en una libreta

Estrategias para aumentar tu ingreso computable (y tu probabilidad de aprobación)

  • Amplía el histórico: si el variable mejora en los últimos 12–24 meses, aporta todo el periodo para que se vea la tendencia.
  • Pide un certificado a tu empresa describiendo cómo se generan las comisiones/horas extra y su recurrencia.
  • Bancariza propinas si son relevantes y aparecen en nómina. Si no figuran, rara vez se computan.
  • Evita picos de gasto o descubiertos en los 90–180 días previos. Aquí tienes qué preparar en tus extractos.
  • Reduce deudas pequeñas (p. ej., una revolving) para liberar DTI. Si te cuesta, valora convertirla a préstamo más barato.
  • Solicita un plazo algo mayor para que la cuota entre en tu DTI. No te excedas: más plazo encarece intereses.
  • Valora un avalista solvente si tu variable es muy volátil. Revisa pros y contras en esta guía del préstamo con avalista.
  • Opción cotitular: si tu pareja/conviviente tiene ingresos estables, un préstamo cotitular puede mejorar el DTI del conjunto.

Alternativas cuando el banco solo computa una parte pequeña del variable

  • Préstamo vs línea de crédito: si tus cobros son irregulares por temporada, quizá encaje mejor una línea de crédito para usar solo lo necesario y pagar intereses por lo dispuesto. Revisa diferencias y usos recomendados.
  • Pignoración de ahorros: si dispones de un depósito/fondos, un préstamo pignorado puede abaratar el tipo y elevar el importe.
  • Aval de vehículo: si tienes coche en propiedad, algunas entidades especializadas admiten línea de crédito con coche como aval o préstamo con prenda sin desplazamiento. Suma riesgo: si impagas, puedes perder el vehículo.
  • Capital privado sin aval: suele ser caro y restrictivo. Antes de acudir, revisa límites, costes y riesgos en esta guía y considera alternativas.

Errores comunes (y cómo evitarlos)

  • Inflar ingresos presentando meses pico sin aportar medias: los analistas recalcularán y perderás credibilidad.
  • Solicitar en demasiadas entidades a la vez: puede dañar tu scoring y dejar rastro. Aquí explicamos cuántas solicitudes puedes hacer sin perjudicarte.
  • Confiar en variables no bancarizadas (propinas en efectivo): si no constan en nómina/extractos, rara vez computan.
  • Obviar deudas pequeñas creyendo que no cuentan: todas computan en tu DTI, incluidas tarjetas y BNPL.
  • No preparar la documentación: una solicitud incompleta suele terminar en oferta peor o en denegación. Usa la checklist de documentos.

Pasos para tramitar tu préstamo con ingresos variables

  1. Calcula tu ingreso computable con la media de 12 meses y aplica un 60–80% a la parte variable.
  2. Estima tu DTI y cuota objetivo. Apóyate en la guía del DTI.
  3. Reúne documentación (nóminas, contrato, vida laboral, extractos, certificado de empresa, 190 si procede).
  4. Elige producto según tus flujos: préstamo vs línea de crédito. Consulta cuándo elegir cada uno.
  5. Presenta la solicitud explicando tu modelo de ingresos (breve memoria) y aportando el histórico.
  6. Negocia TIN/TAE, comisiones y vinculaciones. Si te piden avalista, revisa riesgos en esta guía.

Cuota máxima: tabla orientativa por DTI

Usa esta referencia rápida para estimar tu cuota máxima en función de tu ingreso computable y DTI objetivo:

Ingreso computableDTI 30%DTI 35%DTI 40%
1.200 €360 €420 €480 €
1.500 €450 €525 €600 €
1.800 €540 €630 €720 €
2.100 €630 €735 €840 €

Recuerda restar las cuotas vigentes para conocer tu margen de nueva financiación.

Costes y condiciones a vigilar

  • TAE vs TIN: la TAE recoge intereses, comisiones y periodicidad. Úsala para comparar ofertas reales.
  • Comisiones: de apertura, estudio, amortización anticipada. Valora si compensa pagar más apertura por menos TIN.
  • Vinculaciones: seguros o productos asociados. Pueden encarecer el coste total. Aprende a valorarlas con cabeza.
  • Intereses de demora: revisa límites legales y qué pasa si te retrasas en esta guía.

Conclusión

Si cobras comisiones, incentivos u horas extra, tu caso exige método: cuantificar bien el variable, documentarlo, cuidar tus extractos y ajustar el DTI con el plazo adecuado. Con estos pasos, y presentando un expediente ordenado, podrás defender mejor tu solicitud y, como mínimo, evitar ofertas peor valoradas por falta de información.

Aviso: Contenido informativo. Consulte condiciones actualizadas con la entidad antes de contratar. No constituye asesoramiento financiero personalizado.

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