Antes de pedir un préstamo o una línea de crédito, las entidades suelen consultar la CIRBE. Si no sabes qué es, cómo se consulta o por qué puede influir en que te aprueben (o no) la financiación, esta guía te lo explica con un enfoque práctico y ejemplos sencillos.
- Qué es la CIRBE y qué información recoge
- Diferencias entre CIRBE y ASNEF
- Cómo consultar tu informe de la CIRBE
- Canales, requisitos y plazos orientativos
- Paso a paso (online)
- Cómo interpretan los bancos la CIRBE
- Ejemplo práctico
- Cómo mejorar tu perfil de riesgos en la CIRBE (antes de pedir financiación)
- Acciones rápidas (30 días)
- Acciones a medio plazo
- Ser avalista: cómo impacta en tu CIRBE
- Errores comunes al interpretar la CIRBE
- Consejos finales y recordatorio de riesgos
Contenido informativo. Consulte condiciones y procedimientos actualizados con el Banco de España y con su entidad financiera.
Qué es la CIRBE y qué información recoge
La CIRBE es la Central de Información de Riesgos del Banco de España. Es una base de datos que recoge, mensualmente, información sobre los riesgos vivos (deudas y límites de crédito concedidos) que las entidades financieras tienen con sus clientes, tanto personas físicas como empresas.
Aspectos clave:
- Qué se registra: préstamos personales e hipotecarios, líneas de crédito, tarjetas (el límite concedido), avales y garantías, leasing, factoring y otras operaciones bancarias.
- Umbral de comunicación: por regla general, las entidades reportan cuando el riesgo por titular y entidad supera aproximadamente 1.000 €. Si tu exposición es inferior, puede que no aparezca.
- Riesgo vivo: es el capital pendiente o el límite concedido (aunque no lo hayas usado del todo). Por ejemplo, una tarjeta con límite de 3.000 € suma 3.000 € a tu riesgo, aunque debas 0 €.
- Situación del riesgo: la CIRBE marca si un crédito está al corriente, refinanciado o en dudoso (por impagos).
- No es un “score”: la CIRBE no asigna nota; es un informe de posiciones. Cada banco interpreta los datos.
La CIRBE se usa para mejorar la evaluación de riesgos del sistema financiero. Los bancos la consultan antes de conceder financiación para ver tu endeudamiento agregado y si existen señales de alerta.
Diferencias entre CIRBE y ASNEF
A menudo se confunden, pero no son lo mismo. ASNEF es un fichero de morosidad privado; la CIRBE es una base pública gestionada por el Banco de España que contiene tus posiciones de crédito aunque estés al día.
Aspecto | CIRBE | ASNEF (u otros ficheros de morosidad) |
---|---|---|
Gestor | Banco de España (público) | Empresas privadas |
Qué recoge | Créditos, límites, avales y riesgos vivos bancarios | Impagos vencidos y exigibles |
Figuras aunque pagues al día | Sí | No (solo si hay impago) |
Finalidad | Información prudencial de riesgos | Gestión de cobros y solvencia negativa |
Impacto típico | Endeudamiento total y calidad del riesgo | Dificulta la financiación hasta su cancelación |
Si estás en ASNEF, tu acceso al crédito se complica incluso con buenas posiciones en la CIRBE. Revisa cómo salir de ASNEF paso a paso.
Cómo consultar tu informe de la CIRBE
Puedes pedir tu informe de riesgos de forma gratuita. Los canales habituales son la sede electrónica, presencial o por correo. El más rápido es online.
Canales, requisitos y plazos orientativos
Canal | Qué necesitas | Plazo típico de respuesta |
---|---|---|
Online (sede electrónica del BdE) | Certificado digital, DNIe o Cl@ve | Desde inmediato a 24–72 h |
Presencial en sucursal del BdE | DNI/NIE original | Normalmente 1–3 días |
Correo postal | Copia compulsada del documento | Varios días/semanas |
El informe muestra tus operaciones agregadas por entidad: tipos de producto, importes, límites, situación (al corriente, dudoso, etc.) y posibles avales. La información se actualiza mensualmente, con un decalaje temporal (no verás movimientos del mismo día).
Paso a paso (online)
- Accede a la sede electrónica del Banco de España.
- Identifícate con certificado digital, DNIe o sistema Cl@ve.
- Solicita el “Informe de riesgos de la CIRBE”.
- Confirma tus datos y envía la solicitud.
- Descarga el informe cuando esté disponible. Guarda una copia.
Revisa que los datos sean correctos. Si detectas errores materiales (por ejemplo, un préstamo cancelado que sigue activo), puedes reclamar aportando documentación a tu banco y, si procede, al propio BdE.
Cómo interpretan los bancos la CIRBE
Aunque cada entidad tiene su metodología, suelen fijarse en:
- Endeudamiento total (suma de riesgos vivos y límites).
- Relación cuota/ingresos y si los límites contratados pueden elevar esa ratio.
- Historial: si aparecen refinanciaciones, reestructuraciones o deuda dudosa (impagos).
- Concentración de riesgos (mucho con una sola entidad).
- Avales otorgados: el riesgo indirecto por ser avalista también computa.
Para mejorar tu acceso al crédito, trabaja en mejorar tu perfil crediticio y en evitar el sobreendeudamiento.
Ejemplo práctico
María gana 1.700 € netos/mes. En la CIRBE aparecen:
- Préstamo personal: 12.000 € pendientes (cuota 240 €/mes).
- Línea de crédito: límite 5.000 € (saldo 0 €).
- Tarjeta: límite 3.000 € (saldo 500 €, pero en CIRBE computa el límite 3.000 €).
- Aval a su hermano: 8.000 € (riesgo indirecto).
Riesgo agregado: 12.000 + 5.000 + 3.000 + 8.000 = 28.000 €. Aunque no use la línea, el banco ve la capacidad potencial de endeudamiento. Si María pide 10.000 € adicionales, la entidad valorará si su ratio de esfuerzo mensual y su endeudamiento global encajan en su política.
Cómo mejorar tu perfil de riesgos en la CIRBE (antes de pedir financiación)
Acciones concretas que suelen ayudar:
Acciones rápidas (30 días)
- Reducir o cancelar límites no usados (tarjetas y líneas): si no los necesitas, solicítalo. Disminuye el riesgo total que ve el banco.
- Amortizar pequeñas deudas con alto interés o con poco pendiente: libera capacidad de pago y reduce la ratio de esfuerzo.
- Cerrar productos inactivos que aún figuran (tarjetas antiguas, líneas sin uso).
- Regularizar saldos vencidos para que no aparezcan como dudosos el próximo mes.
Acciones a medio plazo
- Consolidar deudas para simplificar y, a veces, bajar cuota (ojo con plazos y coste total). Revisa pros y contras de la consolidación de deudas.
- Espaciar solicitudes y preparar bien la documentación: nóminas, vida laboral, extractos.
- Optimizar el precio: compara ofertas y entiende la diferencia entre TIN y TAE para calcular el coste real.
- Negociar: una buena propuesta y perfil estable ayudan a conseguir el mejor tipo de interés.
Advertencia de riesgo: consolidar o alargar plazos puede reducir la cuota, pero incrementar la TAE y el coste total del préstamo.
Ser avalista: cómo impacta en tu CIRBE
Si actúas como avalista, la CIRBE recogerá ese riesgo indirecto. Aunque no seas el titular del préstamo, tu potencial obligación de pago cuenta para los bancos y puede reducir tu capacidad de endeudamiento futuro.
Antes de firmar, entiende bien tus obligaciones como garante: lee sobre las responsabilidades legales del avalista. Si ya eres avalista, considera cómo afectará a futuras solicitudes de crédito.
Errores comunes al interpretar la CIRBE
- Creer que no aparecerás si no usas la tarjeta: la CIRBE registra el límite, no solo el saldo.
- Confundirla con una lista de morosos: figurar en la CIRBE es normal y no implica impago.
- Solicitar varios créditos a la vez pensando que no se verán: en cuanto se formalicen o superen umbrales, aparecerán y podrían perjudicarte.
- No revisar errores: si algo no cuadra (por ejemplo, un préstamo ya cancelado), reclama con documentación.
Consejos finales y recordatorio de riesgos
- Pide y revisa tu informe antes de solicitar financiación importante.
- Planifica para mantener tu ratio de esfuerzo por debajo de niveles prudentes.
- Reduce límites que no necesites y evita el sobreendeudamiento. Esta guía te ayudará a evitar el sobreendeudamiento.
- Si estás en un fichero de morosidad, trabaja primero en solucionarlo.
Un uso consciente de la CIRBE como herramienta de diagnóstico te permitirá negociar mejor y optar a condiciones más favorables cuando realmente necesites financiación.
Contenido informativo. No constituye asesoramiento financiero personalizado.