¿Se puede añadir un avalista a mitad de un préstamo para mejorar condiciones? ¿Y sustituir al avalista actual tras un divorcio o una mudanza? En esta guía práctica explicamos, con lenguaje claro, qué suele permitir la banca en España, qué documentación pedirán, cuánto te puede costar y cómo pactar el nuevo aval para no asumir riesgos innecesarios.
- Lo básico: qué es un aval y por qué el banco lo pide
- Qué cambios con avalistas admite un banco (y con qué nombres)
- Cuándo tiene sentido pedir el cambio de avalista
- Qué mira el banco para aceptar (o no) el cambio
- Documentación típica que os pedirán
- Costes de incorporar o cambiar avalista
- Rangos orientativos
- Tabla-resumen de opciones y costes
- Cómo negociar el cambio paso a paso
- Ejemplos numéricos realistas
- 1) Incorporar avalista para bajar intereses
- 2) Sustitución de avalista tras divorcio
- 3) Liberar avalista sin sustitución: cuándo es viable
- Riesgos y puntos críticos a vigilar
- ¿Y si el banco no acepta el cambio de avalista?
- Caso especial: préstamos con aval sobre coche o vivienda
- Checklist antes de firmar la novación
- Errores comunes (y cómo evitarlos)
- Preguntas frecuentes rápidas
- 1) ¿Cuánto tardan?
- 2) ¿Qué pasa con la CIRBE?
- 3) ¿Se puede pasar de avalista a cotitular?
- Conclusión y próximos pasos
Contenido informativo. Consulta condiciones actualizadas con tu entidad y, si hay garantías reales (hipoteca o prenda), ten en cuenta los costes notariales y registrales.

Lo básico: qué es un aval y por qué el banco lo pide
El aval es una garantía personal: una persona (avalista) se compromete a pagar la deuda si el titular no lo hace. En préstamos personales, el aval puede mejorar tu perfil de riesgo, permitir importes mayores o tipos de interés más bajos. Pero el avalista asume responsabilidad legal sobre la deuda, a menudo solidaria (el banco puede reclamarle directamente todo).
Antes de tocar un aval ya existente, conviene dominar dos conceptos clave: el aval solidario vs mancomunado y el aval limitado. Ambos se pueden negociar al incorporar o sustituir avalistas, y marcan la diferencia en los riesgos reales que asumirá el garante.
Qué cambios con avalistas admite un banco (y con qué nombres)
Legal y operativamente, los cambios sobre avalistas son modificaciones contractuales. En préstamos personales se instrumentan como novación y requieren el consentimiento del banco.
- Incorporación de avalista: añadir un nuevo avalista, manteniendo al titular (y, si existe, al avalista actual).
- Sustitución de avalista: quitar un avalista e incorporar otro en su lugar.
- Liberación de avalista: eliminar el avalista sin aportar uno nuevo. Es lo más difícil: el banco solo lo acepta si el riesgo del titular ya es suficiente. Más detalle en cómo liberarte como avalista.
Si además quieres cambiar plazo, tipo de interés u otras cláusulas, se trata de una novación de préstamo personal con varias modificaciones a la vez.

Cuándo tiene sentido pedir el cambio de avalista
- Mejorar precio o condiciones: añadir un avalista con buen perfil puede bajar el TIN/TAE o desbloquear la eliminación de comisiones.
- Cambios personales: separación o divorcio, mudanza al extranjero, jubilación o fallecimiento del avalista.
- Riesgo concentrado: cuando el avalista tiene otras deudas o ha perdido capacidad de pago, el banco puede pedir sustitución.
- Responsabilidad mal pactada: pasar de aval solidario a mancomunado o a un aval limitado si el banco lo acepta.
Qué mira el banco para aceptar (o no) el cambio
La entidad reevalúa el riesgo como si fuese una solicitud nueva, enfocada en:
- Ingresos y estabilidad del titular y del nuevo avalista: nóminas o pensión, antigüedad laboral, continuidad.
- Ratio de endeudamiento (DTI): cuota total/ingresos netos. Por debajo del 30–35% suele ser aceptable. Aprende a calcularlo en esta guía sobre DTI.
- Historial y ficheros: ASNEF, BADEXCUG y RAI. Un avalista en listas complica la operación.
- Extractos y comportamiento: el uso de la cuenta y de tarjetas en 3–6 meses previos. Ver qué miran los bancos aquí.
- CIRBE: deudas vivas reportadas al Banco de España y su evolución.
Documentación típica que os pedirán
- DNI/NIE de titular y nuevo avalista.
- Nóminas 3 últimas y contrato laboral, o pensión/vida laboral si procede.
- Declaración de la Renta (último ejercicio) y, si aplica, trimestrales de autónomo.
- Extractos bancarios 3–6 meses.
- Contrato del préstamo vigente y cuadro de amortización actualizado.
- Autorización de consulta a ficheros de morosidad y CIRBE.
Costes de incorporar o cambiar avalista
En préstamos personales (sin hipoteca), los costes se concentran en una comisión por modificación y, a veces, en gastos administrativos. Cuando hay garantía real (hipoteca o prenda), se añaden notaría, registro y gestoría.
Rangos orientativos
- Comisión por modificación: 0,5%–1,0% sobre capital pendiente, o tarifa fija (p. ej., 60–200 €). Es negociable.
- Notaría y registro (si hay garantía real que se modifica): 200–800 € según aranceles y cuantía.
- Gestoría (si aplica): 100–250 €.
Ejemplo: capital pendiente 9.800 €, comisión del 0,75% = 73,50 €. Si además hay prenda de vehículo y se reescribe la garantía, suma de notaría/registro/gestoría ≈ 350–600 €.
Tabla-resumen de opciones y costes
| Operación | ¿Requiere acuerdo del banco? | Coste típico | Probabilidad de aceptación |
|---|---|---|---|
| Incorporar avalista | Sí | 0,5%–1,0% o 60–200 € | Alta si mejora el riesgo |
| Sustituir avalista | Sí | 0,5%–1,0% + posibles gastos | Media: depende del nuevo perfil |
| Liberar avalista (sin reemplazo) | Sí | 0,5%–1,0% | Baja: solo si el titular ya es solvente |
Cómo negociar el cambio paso a paso
- Prepara el expediente: documentación actualizada del titular y del nuevo avalista, más un argumento claro (mejora de riesgo, estabilidad, reducción de cuota).
- Pide oferta de novación por escrito: solicita detalle de comisión, TIN/TAE nuevo (si lo revisan), mantenimiento de plazo y cualquier cambio de comisiones.
- Pacta el alcance del aval: si es posible, negocia aval mancomunado o aval limitado por cuantía y tiempo. Revisa este artículo sobre aval limitado.
- Revisa el borrador: comprueba que la liberación o sustitución del avalista saliente queda expresamente recogida en cláusula clara.
- Firma y conserva copias: si hay garantía real, la firma puede ser en notaría. Pide tu copia y el nuevo cuadro de amortización.
Ejemplos numéricos realistas
1) Incorporar avalista para bajar intereses
Situación: préstamo personal de 15.000 € a 60 meses, TIN 9,0%. Cuota actual ≈ 311,38 €. Intereses totales ≈ 3.682 €.
Propuesta: incorporar un avalista con nómina estable y DTI conjunto del 28%. El banco ofrece bajar a TIN 7,5% cobrando 1% de comisión sobre capital pendiente (12.200 €) = 122 €.

Nueva cuota ≈ 303,47 € (ahorro ~8 € al mes). Intereses restantes con el nuevo TIN ≈ 1.980 € (en el tramo pendiente). Aun sumando la comisión, el ahorro total estimado en intereses supera 300–350 € frente a mantener el 9,0% hasta vencimiento.
2) Sustitución de avalista tras divorcio
Situación: capital pendiente 9.800 €, avalista A desea salir. Nuevo avalista B con contrato indefinido, sin deudas. El banco acepta sustitución con comisión fija de 120 € sin cambiar TIN ni plazo.
Riesgos evitados: A queda liberado por escrito. Recomendación: pactar aval mancomunado (si el banco accede) para limitar reclamaciones directas al avalista B.
3) Liberar avalista sin sustitución: cuándo es viable
Situación: capital pendiente 6.500 €, titular con nómina de 1.700 €, DTI posterior a la liberación del 26% y buen historial. El banco accede a liberar al avalista cobrando 0,5% (32,50 €). Si el DTI hubiera quedado por encima del 35%, la liberación probablemente se habría denegado.
Riesgos y puntos críticos a vigilar
- No hay derecho automático a la liberación: sin consentimiento del banco, el avalista sigue obligado hasta el final si no se modifica el contrato.
- Solidariedad por defecto: si no se pone límite o mancomunidad, el avalista responde de todo y en primer requerimiento. Revisa solidario vs mancomunado.
- Alcance del aval: evita que el aval cubra productos ajenos al préstamo (tarjetas, líneas) por cláusulas de responsabilidad global.
- Duración: negocia, si puedes, que el aval caduque cuando el capital pendiente baje de un umbral (p. ej., 40% inicial) o tras X cuotas pagadas.
- ASNEF del avalista: si el nuevo avalista está en ficheros, la operación puede caer o encarecerse. Prioriza perfiles limpios.
¿Y si el banco no acepta el cambio de avalista?
Alternativas realistas:

- Seguir igual hasta que mejores tu perfil (ingresos, antigüedad, DTI), y volver a pedir la liberación.
- Cancelar con amortización anticipada: si la comisión de modificación es alta, quizá te compense amortizar o cancelar. Revisa cuándo conviene amortizar anticipadamente aquí.
- Reestructurar con nueva entidad: cancelar el préstamo (asumiendo comisiones) y abrir otro con mejores condiciones y el avalista deseado. Ten presente el impacto en CIRBE.
- Convertir a cotitular: si la entidad lo permite, pasar de avalista a cotitular o viceversa. Entiende primero las diferencias reales entre cotitular y avalista.
Caso especial: préstamos con aval sobre coche o vivienda
Si tu préstamo personal además tiene garantía real (p. ej., prenda de vehículo o hipoteca), cambiar avalistas puede requerir modificar también esa garantía:
- Prenda de coche: si solo incorporas un avalista personal (sin tocar la prenda), la firma suele ser privada con el banco. Si cambias la prenda (p. ej., nuevo titular del vehículo), requiere notaría y registro.
- Garantía hipotecaria: cualquier cambio del aval (si figura en escritura) se formaliza en escritura de novación y se inscribe, con costes de notaría y registro. El banco puede pedir tasación actualizada.
Si quieres comparar cuándo compensa mantener aval de coche o pasar a garantía hipotecaria de un tercero, revisa esta comparativa: aval de coche vs aval hipotecario.
Checklist antes de firmar la novación
- Objeto claro: ¿incluir, sustituir o liberar avalista? Debe constar con nombres y DNI.
- Responsabilidad pactada: solidaria/mancomunada y, si se logra, limitada por cuantía/tiempo.
- Costes cerrados: comisión de modificación, y, si aplica, notaría/registro/gestoría.
- Condiciones financieras: TIN, TAE, plazo, comisiones. Pide cuadro de amortización actualizado.
- Cláusulas cruzadas: evita que el aval cubra otros productos o deudas futuras no relacionadas.
- Firma y copias: recibe copia íntegra firmada. Si hay escritura, pide copia simple y, cuando esté, la inscrita.
Errores comunes (y cómo evitarlos)
- Pensar que el banco debe liberar al avalista: no existe ese derecho automático; prepara una propuesta sólida.
- Firmar como avalista sin límites: intenta acotar responsabilidad (cuantía/tiempo) y, al menos, mancomunidad.
- No revisar la letra pequeña: cuidado con cláusulas de vencimiento anticipado, cesión de crédito y comisiones ocultas.
- Ignorar el DTI: si al liberar el avalista tu DTI sube del 35%, es probable que te denieguen.
- No valorar los costes: una bajada de TIN puede no compensar si pagas comisiones altas. Calcula el punto de equilibrio.
Preguntas frecuentes rápidas
1) ¿Cuánto tardan?
Entre 1 y 4 semanas, según entidad, complejidad y si hay que pasar por notaría. Operaciones con garantía real tardan más.

2) ¿Qué pasa con la CIRBE?
El préstamo mantiene la misma referencia. Si se incorpora avalista, puede constar como garante; si se libera, dejará de figurar tras la actualización de reportes.
3) ¿Se puede pasar de avalista a cotitular?
A veces sí, por novación. Pero el cotitular es deudor principal; su responsabilidad es total. Antes de hacerlo, compara pros y contras en cotitular vs avalista.
Conclusión y próximos pasos
Añadir, cambiar o liberar un avalista es posible si el banco percibe mejora o mantenimiento del perfil de riesgo. Prepara bien la documentación, negocia el alcance del aval y valora el coste total frente al ahorro potencial.
Para profundizar y cerrar flecos legales clave, te recomendamos revisar estas guías complementarias:
- Novación de un préstamo personal: qué puedes cambiar y cuánto cuesta
- Aval solidario vs mancomunado: diferencias reales
- Aval limitado: cómo pactarlo y riesgos
- Cómo liberarte como avalista: vías legales y pasos
Recuerda: este contenido es informativo. No constituye asesoramiento financiero ni legal personalizado.
